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La exposición Materias Grises de An Wei retrata de manera simbólica relaciones y conductas entre individuos dentro de una sociedad. A menudo se muestran interrogantes con el espectador, creando un guión sugerido, un tono relatado. Figura y materia se mezclan gracias a un estilo descarnado que desnuda miradas y gestos, y que busca insinuar una narración colectiva. En este recorrido podemos ver personajes que nos observan, que ven limitada la libertad de sus cuerpos, pero no de sus mentes. Sometidos a las convenciones sociales y a la mirada del otro, aceptan reglas impuestas, y se dejan manejar por la multitud obediente. Es una cultura de la aceptación.

An Wei propone un recorrido de iconografías despojadas de significados concretos, pero

que participan del "inconsciente colectivo" con una clara intención de denuncia social. A aquel que no se acomoda al sistema, se le nombra como subversivo. Cualquier disidencia es controlada y los sujetos quedan expuestos a un laberinto de leyes y formas que infantilizan las sociedades.

La muestra presenta obra de taller junto con el trabajo in situ realizado en el Patio Martín de los Heros. Con la idea de aprovechar los materiales más cercanos a su alcance, soportes que recoge y recicla, marcos, tablas, objetos abandonados que encuentran un nuevo uso.

Con un lenguaje visual que mezcla el arte urbano con la figuración académica, sus Materias Grises se expanden jugando con la oscuridad y la materia, con una densidad a veces física. Sus formas y figuras parecen flotar en lo indeterminado, de manera casi espiritual.